Llega el buen tiempo, y con él las ganas de disfrutar de nuestras terrazas y patios. Pero hay que tener en cuenta un factor: la humedad. Piscinas, mangueras, aspersores… todo influye, y más si tenemos un patio o porche con tarimas o revestimientos en madera.
La madera es un material que sufre mucho las inclemencias meteorológicas tanto en verano como en invierno, por lo tanto es importante conocer los tratamientos que nuestra madera precisa.
Con el frío, la lluvia y la humedad, aparecen hongos que pueden acabar deteriorando la madera gravemente. Con el calor, entre otras cosas, esta pierde su color natural.
En Tosan Carpinteros tenemos un objetivo, que tu madera luzca siempre como el primer día, por eso hemos recopilado unos consejos de tratamientos en madera expuesta a la humedad. Para ayudaros a la conservación y mantenimiento de este precioso material.
- Lijado: Elimina las capas de pintura y barniz antiguos, hasta que la madera ‘’ al natural’’ salga a la luz.
- Limpieza: se ha de retirar bien el polvo que genera el lijado, limpiar la superficie y secarla muy bien.
- Aplicación del barniz: podemos encontrar barnices especiales para cada caso, teniendo en cuenta no solo el tipo de madera que se quiera proteger, sino también el lugar en el que se suele ubicar la pieza en cuestión.
En el caso de ser utilizado en el exterior debe ser lo suficientemente transpirable y elástico, además de ofrecer un extra de protección hacia los rayos ultravioleta. Se ha de aplicar con una brocha de manera uniforme, para que así penetre por toda la superficie.
¿Conoces la diferencia entre barniz y lasur?
Aunque ambos son productos para proteger la madera, la forma de actuar es distinta. Ya que mientras que el barniz forma una película protectora sobre la superficie que aísla el poro y lo protege de manchas y vertidos, el lasur actúa a poro abierto, dejando que este transpire eliminando así problemas de hinchazón y deformaciones de la madera por humedad.
En nuestro caso la elección de uno u otro dependerá del ambiente en el que esté situada la madera, por lo que nuestro caso será para maderas expuestas a la humedad (superficies de exterior), el lasur es el adecuado ya que al dejar el poro abierto posibilita que la madera siga respirando.